Quién más piensa en el decoraciones doradas cuando se acerca diciembre con la Navidad y el Año Nuevo?

Tiene todo a ver con los sentimientos más valiosos que suelen despertar con más intensidad a fin de año, y además le queda súper bien a estas fiestas.
 
Es de ganadores, de fiesta, glamuroso, brillante, deslumbrante y acogedor. Decoramos nuestras casas para estas celebraciones porque sabemos que algo importante está por llegar y merece ser destacado.
 
Y si lo adaptamos a los matrimonios?
Muchas parejas se casan al final y comienzo de cada año. El clima en la parte sur de la Tierra suele estar más agradable y esto ayuda a tener ganas de comenzar a celebrar.
 
A mí me parece genial aprovechar estas épocas para casarse, uno sigue con esa motivación festiva y lleno de buenas energías.
 

Si piensas en casarte en diciembre o enero, este post va colaborar a tu inspiración y tal vez, como a mí, a quitarte el preconcepto de que el dorado es muy dramático y reservado solo para matrimonios en la noche. Sorpréndanse y enamórense del versátil dorado!

Tal vez solo queremos darle ese toquecito de brillo a nuestra decoración. Toques de dorado para decoraciones de día van perfecto! Y podemos dar pistas de cómo va ser el ambiente desde las invitaciones 😉

Siguiendo con el dorado diurno y levemente más osado que la foto anterior. Miren que bien quedan los posa platos dorados y los arreglos de mesa del mismo tono. Para que no quede muy «glow», usar tonos de marrón harán que todo se sienta en la misma frecuencia.

A los matrimonios de día, también les va el dorado!

Otro ejemplo de un posa platos en dorado, pero este ya nos da la impresión de que es para un matrimonio de noche. El dorado es más brillante y el marrón más profundo.

Es cuestión de jugar con las tonalidades!

Si nuestra onda es mucho más rústica y hasta vintage, el dorado en detalles de la decoración es lo que va hacer que se encienda el ambiente y le dé un toque de glamour a la decoración.

Estos zapatos… y el deseo por tenerlos. Un poquito del dorado en los pies, si es que no queremos que el bouquet o alguna parte del vestido sea dorada, pero queremos vestir también «su algo»  brillante.

Y, finalmente, el dorado en su máxima expresión!

Si dejamos ser al dorado, acaba en esto: glamour, elegancia y hasta ostentación. El dorado es así, le gusta hacer el factor «WOW!» y que todos se queden deslumbrandos.

Nos gusta? En verdad que me encanta!

Nos resta elegir cual va con nosotras y ponerlo a trabajar.

 

Besos!

María Pía

Imágenes: (1, 7 y 8: Constance Zahn), (2: Blacktie), (3: Realizando um Sonho), (4: Vestida de Noiva), (5: Mother of the Bride), (6: Silvia Frogonese)

2 comentarios. Dejar nuevo

Me encanta!! yo elegí el dorado como decoración!!! y me caso al medio día!!

=)

María Pía Moreno Vásquez
28 marzo, 2016 1:15 PM

Angela,

Que hermoso! Personalmente, amo el dorado en bodas de día <3

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *